El ser humano es una raza cruel

Hoy apareció un ratoncito en mi trabajo.

Cuando mi jefa se enteró hizo que se comprase pegamento para tenderle una trampa. El pegamento se puso en un cartón con unas galletas, acabo de ver que el ratoncito está ahi, pegado, agonizando y una compi y yo nos hemos echado a llorar.

¿Tanto mal hacía? Supongo que sí. Es antihigiénico y transmite enfermedades pero se me ha partido el corazón al ver al pequeño (diminuto) animalito ahi agonizando.

Que asco damos.

Mierda de martes

Resulta que tenemos un ratón en el trabajo y yo no quiero matarlo pero es un poco una guarreria. Los ratones transmiten un montón de enfermedades.

Ultimamente el clima laboral mola mucho. Nos hemos unido bastante las niñas que estamos por la tarde y estoy bastante contenta si no fuera porque estoy agobiada con unos proyectos que hay que arreglar y es una auténtica mierda estaría muy feliz.

Empiezo a pensar que cuando más a gusto esté me va a tocar irme.

Me pregunto si nuestro ratoncito será en realidad una musaraña, según las testigos oculares es muy muy pequeñlito.

Si no lo matamos podríamos llamarlo «Pérez»

It’s raining… water

Pues sí amigos, tengo un trabajo de chinos que hacer y están montando una cosa en el curro. Tengo que terminar sí o sí y estoy hasta el chocho de oir el ruido de la lluvia contra mi claraboya que mierda.

Si las gotas de lluvia sintiesen ¿qué sentirían? ¿Vértigo al caer de una nube, emoción al estrellarse contra el suelo y diversión al correr por entre las calles? Ser gota de lluvia después de dos meses lloviendo intensamente debe ser duro, ya no se es bienvenida, no es la tormenta en un año de sequía, no se es necesario, se es molesta, incordiante, pesada, estresante, causante de atascos y malos humores. La gota no puede llorar, porque mojaría aún más, la gota se sabe perdida, puesto que empezó siendo salvadora y termina convirtiéndose en causante de desgracias y dolores como las inundaciones.

Pero las gotas son orgullosas y no se arrepienten de ser lo que son, no tendría sentido

What would mamma say?

Hoy es uno de esos días en los que me alegro de tener varios blogs, uno como forera, otro que conocen algunos de cuando cierta persona puteó este blog y mi blog secreto.

Ese blog secreto, que es un diario, como el que las niñas escriben de adolescente, que es mio y que nadie conoce, algo perdido en el mundo de internet que nadie descubrirá porque no comento en otros blogs, porque no cuento nada interesante.

Asi que en esta helada mañana de febrero hablaré de este asco de sociedad, otro día más. Yo cuido a una niña, una niña listísima, guapísima que tiene 9 años. Mi niña, a sus nueve años quiere tener messenger y mp3 y hasta un móvil. ¿Por qué quiere eso? Porque en su clase la mayoría de compañeros tienen todo eso. ¿Sería bueno que lo tuviese? ¿o malo?

El móvil es un gasto de dinero, que obviamente asumirían sus padres y que sólo le servirá para gastar dinero tontamente. El mp3 creo que principalmente la dejará sorda y lo del messenger me parece una completa estupidez. Ella lo quiere para «hablar» con sus compañeros de clase, que ve todos los días y con los que debido su apretada agenda de actividades extraescolares no podrá coincidir, casi seguro, por las tardes.

Las niñas del curso superior ya tienen todas messenger, una que conozco, su madre aceptó a condición de que no agregue desconocidos… Me da asco y me asusta ¿Cómo serán las cosas cuando yo tenga hijos (si es que yo llego a tenerlos)? ¿En qué tipo de sociedad crecerán? ¿Qué tipo de madre seré? ¿Tendré que elegir entre mis principios y que mi hija sea una paria social?

Y mientras escucho Evanescence, «My Immortal» me pongo triste y tengo bastante claro que mi madre me dejó siempre hacer lo que quise y que yo seré una madre un poco dictadora. Una señorita Rottemeier cualquiera, que cree en los límites, al menos en teoría.

Buenos días

To barf

Hola, siento haber estado tan perdida pero es que estoy hasta arriba de curro.

El viernes estuve en un congreso y me lo pasé bien y comi gratis. Lo malo es que estuve todo el fin de semana vomitando como una perra. Lo que pasa es que como ya he pasado por esto antes estaba preparada y no comi. Porque cuando como lo paso peor, porque lo vomito, sea aquarius o un cachito de manzana. Asi que el sábado no comí y el domingo comí un poco de arroz blanco. Ayer cuando llegué de trabajar si que tenía frío y me tomé una sopa y no me sentó especialmente bien.

Estoy cabreada, con las instituciones, con Dios y con la Virgen. Ayer nos llamaron porqu hay una abuelita de 62 años viviendo en la puta calle y con la que está cayendo pues hubo un alma caritativa que se preocupó y llamó a mi asociación por si podíamos hacer algo. Desde ayer hemos llamado a muchos muchos sitios y en la mayoría no solo no tienen soluciones sino que nos hablan mal. Me encabrono porque la buena señora se morirá en la calle y todo el mundo se sentirá tranquilo porque todos hicieron su trabajo, estrictamente su trabajo, nada más y nada menos. Pero ¿y su deber como personas? ¿No se les mueve por dentro nada al saber que hay una mujer de 62 años en la calle?

No pretendo cambiar el mundo, pero no creo que hable de una generosidad extrema, no digo que haya que ser una Madre Teresa de Calcuta, hablo de ser persona. No pido que nadie la acoja en su casa, pido que alguien piense en ¿Conozco algún recurso? ¿algún teléfono? ¿algo?

Luego nos rasgaremos las vestiduras por la generación NiNi y haremos estudios, y programas de televisión y no nos daremos cuenta de que estamos nosotros muertos y podridos por dentro.

Esto sí que me da arcadas y no el virus que tengo en el estómago