V.M.

Recordar lo bien que nos besamos hace que empiece a notar un montón de hormiguitas en mi estómago. Recordar esa sensación cuando nuestras miradas se encontraban y la paz invadía mi mente. Lo malo, es que todo eso son recuerdos, que se escapan como los minutos del Spotify.

El mundo gira y se ve que a mi me aleja de las cosas que me gustan y no me quedan más que un puñado de canciones de Vetusta Morla que intento que me gusten en tu honor.

¿Cuando me quede vacía y sea sólo una carcasa, sin capacidad de amar, hueca y sin ganas de vivir seguirás interesado en mi?

Valladolid

Pues en esta ciudad es donde he permanecido los últimos días y la verdad es que me ha sorprendido, para bien. Muy probablemente esta grata sorpresa se debe a que todo el mundo me había hablado mal de ella. Ir de viaje siempre es una experiencia, siempre enseña algo (si qieres aprender, claro) y es una oportunidad. Viajar puede servir para reflexionar o para desconectar, para evadirte de la realidad o para sumergirte en ella.

Mañana vuelvo a mi ciudad, mañana comienza de nuevo la rutina y no sé si estoy mentalmente preparada para ello. Ahora estoy aqui, frente al ordenador, pensativa, intentando digerir un frappe más espeso que la niebla en Londres y muy chinada. Chinada por millones de motivos.

Sigo mirando la pantalla sin saber qué escribir, sabiendo que estoy atrapada y que todo sería más fácil si nadie me conociera, si fuera un ente desconocido de internet. Dulce anonimato.

Hago un break en mis pensamientos y me dejo llevar por la frivolidad.

Fucking Monday

Que mal. Ayer después de currar caí en un estado de imbecilidad que me llevó a cortarme las venas con un folio (metaóricamente hablando). Obviamente hay un desencadenante, pero es cierto que todo vino de tener la tarde libre, porque trabajé por la mañana y estuve super feliz. El problema llegó en mi casa cuando empecé a darle vueltas al tarro.

Obviamente hay mucha mierda interior, peeeeeeeeeeero es algo que normalmente mantengo bien tapadito. Lo que pasa es que ayer se desbordó. Y es gracioso, porque 48 horas antes estaba diciendo que ya había superado todo lo relacionado con el desencadenante y ayer, plaf, la primera en la frente. Sé que el dolor que me provoco a mi misma no es bueno. El ponerme a pensar que debo tener algo malo, o que no soy lo suficientemente buena lo único que logra es que me sienta más miserable. Es una conducta que siempre afirmo que he de enmendar, pero la cabra tira al monte y se ve que mi monte es el del Destino.

Las cosas son como son y al final lo que cuenta, lo que queda, son los hechos y los actos. Las palabras y las buenas intenciones acaban en el retrete.

Hoy es lunes, tengo un turno de mierda, pero no voy a permitir que ningún pensamiento me hunda en la miseria. Quizás esté pecando de optimista pero tengo que esperar que el día me deparará alguna sorpresa positiva porque como me descuide sé que volveré a pensar y eso no es bueno. Me siento vulnerable en los últimos tiempos, siento que tengo más ganas de abrazos, de mimos y de cariño.

Asi que feliz lunes, feliz semana y cuidaos mucho.

Buenos días pedorros

Ahhhh qué felicidad, tengo un día libre, para mi, para no hacer nada, para no madrugar. Me siento feliz y tranquila (aunque mi gata trata de desquiciarme)

Ahora en un ratito iré al gimnasio antes de que me entre la pereza total, porque no nos engañemos, estoy de relax pero tengo que perder los kilos que he engordado. Maldigo mi metabolismo y mi afán por comer. Siempre seré una gorda (aunque adelgace) porque siempre tendré que vigilar lo que como y siempre tendré que mantenerme activa.

Por lo demás decir que esa energía que me acompaña en el avión de vuelta a casa desaparece. Esa sensación de que tengo que hacer algo por cambiar mi vida se diluye en el día a día. ¿Será que se me va la fuerza por la boca o que los sueños no aguantan el peso de la realidad?

Feliz miércoles.

Cuanto tiempo sin actualizar

Sí, lo sé, os he abandonado. También sé que teníais claro que no me había quedado a vivir en Austria asi que me he despreocupado un poco.

Ains, pero qué bonita es Viena y esta vez tengo fotos, que como normalmente voy sola a todas partes pues es una mojona porque nunca salgo. Por suerte mi amiga la acogedora me hizo muchas fotos y en algunas no salgo horrenda.

La vuelta a la rutina es una mierda, como siempre y además estoy más gorda. Desde mi viaje a Gran Canaria, al día de hoy he engordado 3 kg. Maldigo mi metabolismo y lo mucho que me gusta comer. De todas formas intento ser positiva y volver al redil y al buen camino.

En el trabajo he tenido una semana dura con varios días problemáticos asi que los días que descanse ahora los aprovecharé para tomarme la vida con mucha tranquilidad y buscaré la paz interior y exterior.

Por cierto chicas, los austriacos son más guapos que los alemanes.