Yo Robot

Mientras mi cerebro intenta ponerse en funcionamiento y mi gato se golpea contra la pantalla de mi netbook (eso sí, con la lengua fuera como si fuese idiota) yo como persona, ente, como conjunto al fin y al cabo me planteo qué cojones escribir a estas horas de la mañana.

Al abrir los ojos he sentido una profunda tristeza y sinceramente no sé como deshacerme de ella. Ahora mismo daría lo que fuera por cerrar los ojos y no sentir este agobiante calor, por no estar dónde estoy. Sin embargo hay deseos que no se cumplen. Al menos no de manera instantánea. Asi que sigo en marcha, como una autómata. Bloqueo mis sentimientos para seguir adelante, para no detenerme.

Back to reality

Con lo bien que estaba en la playa y me toca volver a la realidad, esto es una mierda, pero no hay nada que se pueda hacer. Supongo que el truco es hacer de la realidad un sitio agradable.

Cádiz es un lugar maravilloso, lo único malo, el Levante. Lo que me ha gustado de estos días ha sido el estar con la familia, tranquila, sin ningún tipo de preocupación. No he pensado ni en el trabajo, ni en el calor, ni en nada de nada. Sólo estaba yo, con mi playa, mi piscina, mi abuelita y mis tias. Planeando escapas a otros lugares. Pensando en aprender a montar a caballo o hacer submarinismo. Pensando en lo lo afortunada que soy.

El problema es que la vuelta a mi ciudad ha sido extraña, como si una nube de malhumor se hubiese apoderado de mi. Es todo tan extraño y tan complicado.

No logro comprender algunas de las cosas que me suceden, pero supongo que hay cosas que simplemente no se han de comprender sino que se han de asumir, como las consecuencias. Siempre es interesante averiguar cosas nuevas y hacer descubrimientos (no siempre agradables)

Hoy por hoy no estoy orgullosa de mi pasado y desearía no haber tenido que andar por ciertos caminos, pero es mi realidad y me ha servido para aprender algunas cosas y para estar segura de mis decisiones. Mi integridad, mi felicidad, mis sueños valen más que cualquier cosa y no pienso permitir que me vuelvan a hacer daño de manera gratuita. Sé lo que pasó y me importa muy poco lo que piensen los demás. Nunca más seré una gacela.

La playa

Hoy, no tengo muy claro a qué hora me desplazaré a una zona de Cádiz para ser acogida y mimada. No sólo por mi abuela sino por el suave rumor de las olas, la tranquilidad y el sol. Mientras me rasco el cuello debido a que esta noche salí y me quedé dormida con el colgante me imagino tumbada en un entorno paradisiaco y hermoso. Lo malo es que estará petado de gente, pero que le den por culo a la gente, además seguro que la crisis ha mermado el número de gente que va a la playa.

Me espera la tranquilidad y el bienestar, asi que, nos vemos pronto =)

Women

Yo no sé porqué las mujeres en general o yo en particular tenemos una autoestima tan baja. Es algo sobre lo que tengo que trabajar. Para mi, es lo único que justifica (mi baja autoestima) el que recuerde con cierto cariño un comentario que me hicieron el año pasado.

Volvía de estar con unos amigos, ellos seguían de juerga y yo me retiraba. Volvía a mi coche sola, cuando pasé por delante de un grupo de chavales que estaban terminando de hacer botellona. Cuando pasé cerca de ellos saqué una botella de agua y bebí un poco a lo que uno de los borrachos dijo: «a esta le daba yo de beber y no agua precisamente»

Nunca me habían dicho una barbaridad asi, pero de algún modo me enterneció. Si es que no hay quien nos entienda.

¿Tú qué eres?

¿Y tú? ¿Qué eres?¿Un zombie o una planta? Plantas contra zombies es un entretenidísimo juego que he tenido la suerte de probar. Es sencillo, divertido y para todo los públicos. Es para la gente jovenzuela como yo, para los niños y para la gente de mediana edad.

El mecanismo es sencillo, los zombies quieren entrar en tu casa y tú debes de poner unas plantas estratégicamente para que éstas acaben con los zombies. Sencillo ¿verdad?

Una ventaja es que se van desbloqueando minijuegos y puzles a los que puedes acceder al menú principal.

Totalmente recomendable os animo a que os entretengáis un rato en estas calurosas tardes de verano. Yo mientras tanto intentaré conciliar el sueño que ando un poco loca con los horarios.

Cosas X

En la vida no todo son grandes descubrimientos o revelaciones. En la vida a veces uno se da cuenta de un pequeño gesto, de algo que es una chorrada como un piano, pero que le hace preguntarse ¿por qué?

En mi caso mi mini descubrimiento ha sido que a veces me toco las nalgas, como comprobando que siguen allí. Lo puedo hacer mientras espero al ascensor, o mientras desespero porque el semáforo no se pone en verde…