Muchas veces lo que más cuesta es tomar una decisión y después todo va como la seda.
Otras lo que cuesta es mantener esa decisión, porque de alguna manera no valoramos lo que es traicionarnos a nosotros mismos, si asi fuera mantendríamos nuestras decisiones hasta el final. Pero es tan cómodo dejar esa dieta para mañana, esa charla para otro día, esa desintoxicación para un momento mejor.
Y mientras postergamos convertir nuestras decisiones en actos, muchas veces nos vamos destruyendo, poco a poco, nos dejamos ir.
A veces reacciones a tiempo, otras simplemente nos hundimos.
Soundtrack dice:
Siempre se están tomando decisiones, Eriwen, solo que no siempre tienen un sentido trascendental en la existencia. Son cosas mas mundanas, ¿carne o pescado? ¿playa o montaña? ¿ingles normales o brasileñas? :), etc… Pero claro, el problema en sí, como tu dices, no es decidir sino apechugar con lo que se haya decidido. Realmente no tomas una decisión sober si hacer una cosa o la otra, sino que decides cual de las dos opciones es la menos mala.
Y si la decisión no es entre dos cosas, sino entre hacer algo o no hacerlo, entonces no es duda, sino miedo al después, me temo… (o eso me ha parecido entender, que ya sabes que no tengo muchas entendederas….). En cualquier caso, espero que estés a gusto con la decisión que tomes, sea cual sea…
Lula dice:
Mmmm
El peso de las consecuencias….. si te motiva te recomiendo ‘La soledad de los números primos’, donde entre otras cosas se habla de eso, del peso de las consecuencias de las decisiones que tomamos en un momento dado, de las decisiones que meditamos largamente y de las decisiones que surgen espontáneamente y de forma irrefrenable e irreflexiva.
Yo me dejo llevar. Me cuesta tomar decisiones, xq me cuesta asumir las consecuencias. Mucho. Xq tenemos que aprender que nunca vamos a hacer felices a todos, y eso requiere mucha personalidad y tenerlos muy bien puestos. Y es admirable.
Yo… bueno… soy fatal para eso.
Si tu tomas tus decisiones y soportas su peso, chapeau nena, en serio.
Eso es ser valiente. Y aunque ahora alguien pueda sentirse más o menos dolido, tu has sido honesta y has ido de frente.
Los cobardes terminan tb haciendo daño y además son rastreros, escurridizos y despreciables.
Besotes!