Mañana es el día, me reincoporo después de un mes sin trabajar, todo esto con un ambiente laboral infernal… como mola ser pobre ¿eh?
Este mes, con mis dolores de espalda, con la noticia de la subrogación o despido, con todos sus altibajos emocionales me ha dejado varias cosas claras. La primera es que soy una vaga, podría haber hecho millones de cosas y aún así hehecho cuatro y tirando de lo más hondo de mi ser. La segunda, si me quedo en el paro qué mal lo voy a pasar. Voy a ser la típica que se acuesta las mil, necesito una rutina. También es cierto que estando lesionada y tomando drogas no es tan fácil darlo todo (papi) pero me asusta. La tercera verdad absoluta que me ha sido revelada es que necesito reciclarme. Necesito aprender cosas nuevas y abrir mis horizontes y perspectivas laborales y para ello necesito ayuda porque yo no sé por dónde tirar. La cuarta y última cosa (creo) es que lo mejor de mi es que aunque me cuesta mil, al final hago las cosas. Me he empezado a mover por redes sociales, he llamado a puertas, he empezado a buscar la forma de encontrar asesoramiento y he actualizado mi currículum (no está mal para una drogata como yo ¿eh?)
Mientras escribo todo esto intento mantenerme positiva y pensar que todo irá bien mañana y los días siguientes, que lo peor ha pasado y que estoy fuerte, pero estoy acongojada (acojonada, haciéndome caquita, asustada, preocupada, ansiosa…)
Saludos.